Los primeros dientes del bebé: Síntomas, trastornos y todo lo que necesitas saber

¿Cuándo salen los primeros dientes de los bebés?

El primer diente suele aparecer alrededor de los 4-6 meses de edad. Es uno de los dos incisivos centrales inferiores, al que pronto seguirá el otro. Por lo que tarda más que cuando empiezan a ver los bebés.

Sin embargo, entre los 7 y los 8 meses, es el turno de los incisivos centrales superiores, seguidos, entre los 12 y los 18 meses, por los incisivos laterales, primero los superiores y luego los inferiores.

Inmediatamente después de estos, será el turno de los molares. Entre los 18 y los 24 meses, aparecerán los caninos inferiores y superiores. Finalmente, entre los 24 y 30 meses, aparecen los segundos molares.

A veces puede ocurrir que haya retrasos en la aparición de los primeros dientes: ¡No te alarmes! No hay que alarmarse, sólo hay que preocuparse si no ha aparecido ni un solo diente en el primer año de vida. Los motivos del retraso pueden ser muchos y no están relacionados con enfermedades o carencias nutricionales: Generalmente tienen más que ver con el crecimiento personal del niño y sus antecedentes familiares. Si los padres también se duelen tarde, es probable que también les ocurra a sus hijos.

Los primeros dientes del recién nacido: Los síntomas

¿Cómo darse cuenta de que el bebé está poniendo el primer diente? Hay algunos síntomas bastante evidentes. En primer lugar, aparecen uno o varios puntos blancos en la encía, que tiende a enrojecerse e hincharse.

La mejilla también puede aparecer enrojecida por dentro, así como por fuera puede haber una hinchazón de la barbilla y el cuello en correspondencia con ella.

Sin embargo, el síntoma más evidente es el malestar que empieza a sentir el bebé y que le lleva a llorar, a estar inquieto y a perder el sueño. Además, el bebé puede mostrar signos de falta de apetito y su salivación puede aumentar considerablemente y es más probable que babee.

Los mejores productos para aliviar las molestias

Para ayudar a reducir las molestias de tu cachorro, existen varias soluciones, todas ellas fácilmente disponibles en Amazon y que pueden combinarse.

En primer lugar, puedes utilizar un bálsamo dental inicial como el Mitosyl, que tiene una acción sedante y descongestionante y no contiene anestésicos ni azúcar.

Junto con el bálsamo, otra solución es el masajeador de encías con diferentes tipos de relieves son ideales.

También hay otras opciones más sofisticadas, como los masajeadores refrigerados o los masajeadores en barra, que parecen cepillos de dientes y permiten tener más control sobre el masaje y dar a tu bebé un alivio aún mayor.

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Qué trastornos pueden causar los primeros dientes de los recién nacidos y cómo tratarlos

A menudo, la aparición de los primeros dientes en los recién nacidos va acompañada de fiebre, diarrea u otros trastornos. Sin embargo, según los médicos, no existe ninguna correlación entre ambos fenómenos, ¡En contra de la creencia popular! Las enfermedades y los virus afectan más al niño durante este periodo porque es la fase en la que deja de estar protegido por los anticuerpos maternos y entra en contacto con virus externos por primera vez. Por lo tanto, nada que ver con los dientes.

El dolor y las molestias que el niño siente por la erupción del diente de leche pueden aliviarse mediante el uso de juguetes especiales de goma rugosa con líquidos refrigerantes en su interior que, una vez fríos, permiten al niño anestesiar la encía al morderlos. ¡Un auténtico masaje de encías!

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Si prefieres en cambio los remedios naturales, puedes utilizar tomillo, manzanilla, malva, caléndula, para aplicar varias veces al día sobre las encías en forma de ungüentos específicos que se compran en las farmacias. Sus propiedades calmantes ayudarán al niño a soportar el malestar.

¿Cómo lavar los primeros dientes del bebé?

Los dientes ya han aparecido, o al menos están parcialmente colocados, y hay que limpiarlos. Sería una buena idea comenzar la limpieza tan pronto como salga el primer diente. No debe limpiarse con un cepillo de dientes, sino con una gasa, Al menos dos veces al día.

El cepillo de dientes debe utilizarse cuando hayan salido más dientes. Evidentemente, hay que elegir uno con cerdas suaves, adecuado para el recién nacido y sin usar pasta de dientes, ¡sólo con agua! La pasta de dientes, en pequeñas cantidades, sólo puede utilizarse a partir de los 16-18 meses de edad.

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